Es importante ver la descripción fría y
real que hace el protagonista sobre la actualidad con los despidos, no es
importante el empleado en sí, sino que la compañía que despide quede libre de
inconvenientes que se puedan presentar y para que esto no se dé, se le ofrece
al despedido opciones que le permitan encontrar empleo de manera más rápida
pero sin darle el acompañamiento real, sino para salir pronto de ese problema.
Son muchas las empresas que se enfocan
más en la productividad y el rendimiento económico que generan los empleados,
que en brindarles un trato humano y digno, el hecho de contratar una persona para
que realizara el trabajo sucio de despedir a una persona y evitar según ellos
de esta manera, hechos de violencia y problemas legales, habla de una empresa
que no le interesa el sentir de las personas que hacen parte de su
organización, ni del tiempo que estuvieron vinculados en ella sino de las
ganancias que se obtienen. Es probable que esta película sea un reflejo del
futuro donde muchas empresas se vuelvan cada vez más inhumanas y lleguen a
implementar medios virtuales no directos para comunicarles a los empleados que
ya no se requiere de su servicio.
A pesar que la meta de los protagonistas era la de
cumplir con la tarea de despedir personas sin cargo de conciencia, de manera
fría y evitando sentimentalismo, Ryan realizaban el proceso de manera que el
empleado no se sintiera un total fracaso, sino que le brindaba la visión de una
gama de Posibilidades para cumplir sus metas y sueños, que vieran en este fracaso
una oportunidad de mejora.
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